Gracias a una alianza con el clan de los “Charlines”, el objetivo de su organización -reconstruída durante el año 2020- era distribuir en exclusiva su mercancía en Burgos contando para ello con una gran flota de 20 vehículos, varios de ellos con compartimentos estancos para ocultar dinero o mercancía con complejos sistemas de apertura
En la operación han sido detenidas un total de ocho personas y se han intervenido 20 kg de “speed”, 5 kg de “MDMA”, 300 kg de hachís, 57 kg de cocaína, 50 kg de marihuana, 2 kg de anfetamina y medio kilo de ketamina