El domingo 1 de febrero,  la comisión de fiestas de San Blas de Budiño 2015 hará entrega del tradicional Ramo de laurel a la comisión entrante, los vecinos del barrio de Casal que serán los encargados de organizar las fiestas del próximo año

Todavía quedan unos días para que Budiño celebre las fiestas en honor a su patrón, San Blas, pero en el Recreativo del Mosteiro los vecinos trabajan contrarreloj para dejar a su barrio por todo lo alto y que todo salga a la perfección.

Nada más finalizar las fiestas navideñas, las mujeres del Mosteiro se pusieron manos a la obra y comenzaron a diseñar y fabricar los arreglos florales que adornarán el andor,  las espadanas y el ramo de laurel, que se exhibirán en la procesión engalanados con flores de papel, cintas de raso, roscas y muñecas de porcelana.

Así, el próximo domingo 1 de febrero,  la comitiva transportará la tradicional Carroza de Ramos desde el Centro Cultural Recreativo de Mosteiro hasta “A Forna”, acompañados en su periplo por la Rondalla Santa Eulalia de Atios. Una vez allí, la comisión de fiestas de San Blas 2015 hará entrega del ramo de laurel a la comisión entrante, los vecinos del barrio de Casal que serán los encargados de organizar las fiestas del próximo año.

En esta arraigada tradición, que año tras año atrae a cientos de personas, se vuelcan todos los vecinos de Budiño. Cada año, uno de los seis barrios que componen esta parroquia porriñesa, se encarga de organizar la celebración, pasando el testigo a la siguiente con la simbólica entrega del Ramo.

La comitiva del Mosteiro nunca pasa desapercibida, pues les acompañan siempre sus ya esperadas carrozas. Y es que, para entregar el ramo deben recorrer una distancia considerable, por lo que  las espadanas, el ramo y el andor, que tradicionalmente es portado por dos mujeres, son conducidas a su destino sobre unos adornados carruajes. Abriendo este desfile, la carroza en que viaja la Reina de la Fiesta, que, aunque esperada, nunca defrauda. En el año 2003, la carroza del Mosteiro emulaba al emblemático Faro de Budiño, mientras que, en su último desfile, fue el emblema del Recreativo, un molino, el que sorprendió a los asistentes. Sobre cuatro ruedas, se podía admirar un molino de agua en pleno funcionamiento; elemento que este año volverá estar presente en la iluminación que enmarca la entrada del “torreiro”, invitando a participar en la fiesta que los vecinos del Mosteiro han preparado para todos con ilusión, devoción y esfuerzo.