Es obra del arquitecto porriñés Antonio Palacios y fue comenzado en 1921 para finalizarse 3 años después, en 1924. Al parecer se inspiró en la catedral de Tuy para diseñarlo y a día de hoy se alza como un palacio en el centro del casco urbano.
El edificio del Ayuntamiento de Porriño ( 1919-1924) es la obra más importante de Antonio Palacios en su pueblo natal.
Este proyecto debió tener un significado especial para Palacios, ya que además de ser en el donde concreta por primera vez una arquitectura que consideraba de raíces gallegas, fue una obra dedicada a su madre.
La Idea de la construcción de un nuevo edificio viene dada por el estado ruinoso que presentaba la vieja casa consistorial , levantándose la nueva edificación en el solar donde se localizada el antiguo edificio del Ayuntamiento.
En el edificio del Ayuntamiento de Porriño palacios concreta por primera vez su lenguaje regionalista.
El proyecto será entregado de forma gratuíta por el arquitecto al Ayuntamiento de Porriño, siendo ejecutado gracias a la generosidad de Ramón Gonzalez.
La solución del Pórtico a la entrada del edificio da continuidad a la zona de soportales de la irregular plaza en la que se ubica. El pórtico que se abre en la base de la torre sirve de entrada principal dotando al conjunto de una gran movilidad por el complejo juego de volúmenes graduados que interrelaciona el arquitecto.
Basándose en las Catedrales-Fortaleza medievales, A. Palacios incorpora elementos sustanciales como las almenas en el remate de las torres y partes altas de la edificación, así como significativos contrafuertes que fajan la torre. En los arcos laterales de la balconada destaca el virtuoso trabajo de la filigrana de las celosías, mientras en la parte baja de los pórticos sustentados por arcos de medio punto y bóveda de crucería, concentra una decoración a base de festones cóncavos y convexos, así como arquillos ciegos decorando sus intradós.
En esta construcción contará Palacios con excelentes maestros canteros que darán fiel continuidad en obra a los diseños del arquitecto.
En este caso será Manuel Ruibal Solla el que lleve a cabo la construcción.
En el verano de 1976 la Casa Consistorial resultó seriamente dañana por un incendio de causas fortuítas. En el año 1980 estando en la alcaldía Gonzalo Ordoñez, se destinaban 25.000.000 de pesetas su restauración. Aquel dinero daba para restaurar íntegramente la Consistorial, ampliación de dos plantas del edificio y dotación de aire acondicionado. Además se remodelaría la plaza de acceso a la Casa del Ayuntamiento.
De este modo se hacía eco el diario “La Voz de Galicia”