La víctima había llegado a España a principios de año por la actual situación socio-política de su país, tras alquilar una vivienda a través de una página web, los propietarios se aprovecharon de su estado de necesidad y la condicionaron para que ejerciese la prostitución en otro piso de su propiedad con disponibilidad las 24 horas
Debía entregar la mitad de sus ingresos a esta pareja y la incitaban al consumo de drogas y a ofrecerlas a los clientes