El documental de Carlos Caraglia, rodado en Madrid durante los primeros momentos de incertidumbre del COVID-19, muestra el lado más humano de la pandemia. Alejado de sensacionalismos, brinda un homenaje auténtico a la lucha más dramática de los médicos, sanitarios, policías, personal de servicios, etc. La obra ha sido seleccionada en 7 festivales nacionales e internacionales.