Un hombre de 51 años de edad, que caminaba por la calle Sanjurjo Badía, cayó al suelo con convulsiones y entre los vómitos y la sangre emanada por su boca, le cortaba la respiración por obstrucción de las vías respiratorias
La Policía Nacional auxilió a un varón de 51 años, cuando sufrió un ataque epiléptico en la calle, Sanjurjo Badía, a las 09:00 horas del día de ayer.
Los agentes pertenecen a la VIII UIP, con base en Vigo, cuando se dirigían hacia Redondela, para prestar el servicio habitual de Prevención de la Delincuencia, y servicios de control por la pandemia, y sobre la hora indicada, en la calle Sanjurjo Badía, a la altura del 208, fueron requeridos por varios ciudadanos, al parar y comprobar que sucedía, ven a un varón de mediana edad en el suelo, con convulsiones y con la tez azulada, sangrando abundantemente por la boca y la nariz, con problemas serios para respirar, provocados por los vómitos y la sangre que salía de su boca y nariz.
Los agentes desconociendo el problema médico del varón, si perciben su grado de dificultad para respirar, por lo que despejan de inmediato los restos sólidos de la boca de la víctima, y lo colocan de lado para restablecer las vías respiratorias y con ello facilitar la restauración de la oxigenación de la víctima, evitando que se causase más daño mientas llegaban los servicios sanitarios solicitados a la Sala Operativa del 091.
Una vez retoma en parte la respiración, revisan sus bolsillos para encontrar un documento que le identifique para avisar a los familiares, posteriormente aparece su esposa, que les manifiesta a los policías que su marido sufre algunos ataques epilépticos.
Posteriormente llegan los servicios sanitarios, que después de una intervención in situ, lo trasladan al Álvaro Cunqueiro, destacando que la rápida intervención de los agentes actuantes evitó consecuencias fatales.
La intervención fue llevada a cabo por agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP), con base en la Comisaría de Policía Nacional en Vigo-Redondela.