Sindicalistas y trabajadores de Frigolouro se reunieron en la mañana del sábado para exponer los acuerdos alcanzados después de tres años de desavenencias entre la directiva y su plantilla
La jornada laboral será de 7 horas y 35 minutos, quedando los restantes veinticinco para los relevos y comprendiendo los veinte del descanso con una garantía laboral de cinco años
Desde el mes de junio del 2011, la empresa de Frigolouro comenzó a tener conflictos laborales con su plantilla que iban en aumento hasta alcanzar los 27 despidos en la actualidad.
Según las declaraciones de los representantes sindicales en minoría de CCOO (Miguel Román Caride, Juan Andrés Lorenzo Soto y Pablo Castro Carpintero), CIG (Rubén Silva Domínguez y Juan Carlos Pérez Vila) y UGT (Juan Luis Fernández Ojea, Evaristo Táboas Márquez, Margarita Martínez Campos y Ana Isabel Veiga), unidos por las circunstancias, la directiva comenzó a adoptar medidas como:
- Despidos del personal de plantilla sustituyéndolos por autónomos, medida denunciada en la inspección de trabajo desde hace dos años, sin obtener respuesta
- El personal de despiece pasó a realizar tareas de limpieza, alegando la empresa pérdidas económicas sin haber disminuido la producción.
- Eliminación de la línea de vacuno, saltándose así el convenio existente entre el Ayuntamiento y Frigolouro.
- Desvío de producción a las plantas de Orense y Lugo.
Tras varias medidas de presión por parte de la plantilla que dejaban bien claro su desacuerdo, finalmente el jueves tenían una reunión con el alcalde, intentando mediar este en el conflicto y del que no se llegó a un acuerdo. Finalmente al día siguiente, la unión sindical, junto a la directiva y abogados de Frigolouro llegaban a un entendimiento aceptando ambas partes una serie de condiciones:
- Jornada laboral de 7 horas y 35 minutos (en cuanto la empresa lo comunique), con veinte minutos de descanso y veinticinco minutos de relevos.
- El compromiso de no ejecutar más despidos durante los próximos 5 años, exceptuando los disciplinarios o los pactados de bajas voluntarias como prejubilaciones y previamente comunicadas al comité.
- El incumplimiento de este compromiso les devolvería a la situación actual.
Finalmente y sin tiempo para responder a algunas preguntas, la conclusión a la que este tripartito llegó es que la única forma de alcanzar su objetivo de mejoras laborales es manteniéndose unidos.