Operaban a nivel mundial, especialmente en Europa y América y se dedicaban al blanqueo de beneficios procedentes de ciberataques y estafas informáticas
Esta operación policial internacional ha supuesto la práctica de 40 registros domiciliarios en Letonia, Bulgaria, Reino Unido, Italia y España (2), así como la detención de 19 personas, cuatro de ellas en Barcelona donde se habían servido de 106 cuentas bancarias, abiertas con pasaportes falsificados