El equipo de Abel Estévez afrontaba este encuentro con cierta precaución ya que el KH7 Granollers estuvo a la altura demostrando “una gran madurez” sobre la pista a pesar de estar recién ascendido a la División de Honor dejando un resultado de 31-27
Partido “raro” y poco convencional para el estilo de juego de las locales en este encuentro correspondiente a la cuarta jornada; y es que en el minuto 5 se ponían por delante con un 3-1 para alcanzar en los cinco siguientes el 9-2, una ventaja que enseguida se disparó a 12-3 aunque los ataques se tornasen muy precipitados, llegando al final del primer tiempo con un marcador de 19-13.
Iniciada la segunda parte, las visitantes comenzaron a acortar poco a poco la ventaja adquirida por el BM Porriño, llegando a alcanzar, tan solo diez minutos después del reinicio, una diferencia de 20-17.
Este fue el momento en el que, el técnico porriñés, solicitó un tiempo muerto para reconducir a sus jugadoras hacia el dominio del partido, indicaciones que supieron interpretar correctamente para convertir los últimos diez minutos de juego en un apretado final, en el que consiguieron dos buenos contraataques que sentenciaron el partido dejando un resultado final en el marcador de 31-27.
“El KH7 Granollers es un equipo con el que estamos empatados a 4 puntos; puede que les haya tocado mejor calendario que a nosotros, pero nos han demostrado una gran madurez sobre el terreno de juego”, afirmaba Abel Estévez, dejando claro que no hubo sorpresas ya que, “sabíamos cuáles eran sus armas antes de recibirlas y demostraron estar a la altura del partido complicado que esperábamos”.
El próximo fin de semana toca jornada de descanso, debido a compromisos de la selección, algo que beneficia enormemente al BM Porriño, ya que Estévez podrá disponer de toda su plantilla al 100% para el quinto encuentro de la temporada.