Alfonso Marnotes e Ignacio López-Chaves mantuvieron un enuentro con 24 empresas auxiliar del naval y visitó a los alumnos de soldadura en el taller “Mos rehabilita”
El director general de Orientación y Promoción Laboral, Alfonso Marnotes, acompañado por el delegado territorial de la Xunta en Vigo, Ignacio López-Chaves y por el concejal mosense de Promoción Económica, Empleo y Nuevas Tecnologías, Óscar Soto, mantuvieron hoy en Mos una junta con empresarios del naval pertenecientes a 24 compañías, para exponerles las políticas de la Xunta de apoyo a este sector que está en la actualidad consolidando en Galicia su etapa de crecimiento. Tras la reunión, Marnotes visitó a los alumnos y alumnas que se están formando en soldadura en el obradoiro Mos Rehabilita, que apoya la Consellería de Economía, Empleo e Industria.
También en la localidad de Mos, la Administración autonómica financia un curso dirigido a desempleados en la especialidad de soldadura oxigás y soldadura Mig/Mag. Esta acción formativa incluye, tras la cualificación teórica, un módulo práctico en centros de trabajo. La iniciativa forma parte del primer plan sectorial de calificación para el naval 2017-2018, que la Administración autonómica puso en marcha el pasado año y que también está dirigido a personas ocupadas.
Con este plan, dotado con 12 millones, se prevé llegar la 3.000 trabajadores del naval y la industria auxiliar. En 2017 comenzaron 57 cursos en los que participaron 883 alumnos, con una inversión de 4,3 millones de €.
El director general, además, puso en valor el apoyo del Gobierno gallego a la cualificación de los ocupados a través de un programa específico para sectores estratégicos, entre los que se encuentra el naval, un ámbito para el cual destina un millón de euros para la cualificación de cerca de un millar de trabajadores, a través de 63 cursos de los que 50, tendrán lugar en la ciudad de Vigo para 800 profesionales. A través de esta iniciativa se impartirán acciones en las especialidades de soldadura, robótica, calderería o diseño del naval, entre otros. Este programa se lleva a cabo en centros homologados.
A esta iniciativa se unen este año también las unidades formativas en la empresa, tanto para desempleados cómo ocupados. Las primeras convocatorias de estos programas ya salieron publicadas en el Diario Oficial de Galicia -DOG-. En global, para estos dos programas se destinan 6,35 millones en 2018, a través de los que se cualifica a desempleados con formación a la carta en la propia empresa, que tiene que comprometerse a un mínimo de contratación; y a trabajadores de empresas de sectores estratégicos, entre los que se encuentra el naval.
Para las unidades dirigidas para desempleados, el plazo de solicitud está abierto hasta el 5 de abril; y para la iniciativa de ocupados para formar a 1.500 trabajadores en 500 empresas de sectores estratégicos, finalizará el 2 de abril.
Para los desempleados se ofrece formación a la carta en la propia empresa, que tiene que comprometerse a un mínimo de contratación, el 40% del alumnado. La Consellería de Economía, Empleo e Industria financia el 100% de la formación y, para aquellas compañías que superen el compromiso mínimo de contratación, se les ofrece ayudas para promover los contratos indefinidos, que oscilan entre los 7.000 y 16.000 €. El apoyo mínimo de 7.000 € aumentará incluso los 8000 para los parados de larga duración, personas con discapacidad o en riesgo de exclusión social. Además, las mujeres, mayores de 45 años y emigrantes retornados, así como las empresas emplazadas en el rural, recibirán un 25% más de ayuda sobre los 7.000 o 8.000 €, según sea el caso, pudiendo llegar los apoyos, de esta manera, a los 16.000 €.
Las unidades para ocupados están dirigidas a trabajadores de firmas de sectores estratégicos como el naval, la silvicultura, transformación de madera, fabricación de componentes electrónicos y ordenadores, automoción, aeronáutica, fabricación de muebles, edición de programas informáticos y telecomunicaciones y actividades relacionadas con la informática.
A estos programas se suma la oferta formativa que la Xunta apoya para personas desempleadas en centros de formación, como es el caso del curso que se está llevando a cabo en Mos. “Lo que queremos es poner a disposición del sector, personas cualificadas para tener empresas más competitivas”, apuntó el director general.
Marnotes señaló la importancia de adaptar los perfiles profesionales de los trabajadores gallegos, al nuevo modelo industrial. En este sentido, afirmó que uno de los desafíos de la Agenda 20 para el Empleo, es que el sistema formativo se oriente a la realidad de la industria, es decir, a la revolución tecnológica en la que está inmerso el tejido productivo.