
Los hechos tuvieron lugar el pasado viernes festivo y las dos pruebas practicadas superaron el 0,40
El conductor de uno de los vehículos asistenciales de Ambulancias do Atlántico, fue el protagonista el pasado viernes día 8 sobre las 20.00 h, de numerosas llamadas que alertaban a los servicios de emergencia sobre la conducción errática de una ambulancia por la A-55.
Seguidamente, informaban de una colisión por alcance en el p.k. 15,3 de la misma vía -a la altura de O Porriño-, en la que se vieron implicados una ambulancia y un turismo Citroen CS4; al parecer el conductor sanitario se marchó del lugar sin dejar datos al contrario.
El conductor de este vehículo asistencial, se encontraba prestando un servicio de traslado a tres pacientes de diálisis, desde el Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo hasta O Rosal, donde concretamente en Tabagón, fue interceptado por el Equipo de Atestados del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de O Porriño.
Una vez localizado y detenido el vehículo, se procedió a realizar la prueba de alcoholemia al conductor hasta en dos ocasiones, llegando a triplicar la tasa permitida para este colectivo profesional (0,41 y 0,46); y todo ello tras haber abandonado el lugar de un accidente en el que estuvo implicado.
Ante la inmovilización de la ambulancia ordenada por la Guardia Civil, la empresa envió una nueva unidad para hacerse cargo de los tres usuarios y completar su recorrido. Por otra parte, el conductor de la ambulancia -que mostró varias faltas de respeto, durante la realización de las pruebas- ha sido denunciado por un delito contra la seguridad vial.
Desde el colectivo de ambulancias, compañeros han manifestado con asombro la enorme imprudencia por parte de este conductor, ya que no sólo puso en riesgo su vida, si no la de otros usuarios de la vía y de los propios enfermos a los que transportaba.