El conductor circulaba bajo los efectos de las drogas –pendiente de confirmación de laboratorio- y del alcohol, triplicando la tasa mínima establecida

El pasado sábado día 19, la central COTA del Subsector de Tráfico de Pontevedra recibía llamadas de diferentes usuarios informando acerca de un vehículo que circulaba en sentido contrario en la autovía A-55 -sentido Tui por los carriles en dirección Vigo- entre el Polígono de As Gándaras y el núcleo urbano de O Porriño.

Se pasó aviso a las diferentes patrullas en servicio, próximas a la zona, tanto de la Guardia Civil de Tráfico, como de Seguridad Ciudadana, siendo interceptado a la altura del km. 17 en O Porriño, por una patrulla del Puesto de la Guardia Civil de Mos, mostrando el conductor evidentes síntomas de encontrarse bajo los efectos de alcohol.

Instantes después llegó al lugar el Equipo de Atestados del Destacamento de Tráfico de O Porriño quienes realizan la prueba de alcohol al conductor, un vecino de Gondomar de 41 años, que supera en aire espirado tres veces más que la tasa máxima permitida. Asimismo en la prueba de drogas, da positivo indiciario en THC y anfetaminas, pendiente de confirmación por laboratorio.

Por el Equipo de Atestados del Destacamento de Tráfico de O Porriño se instruyen diligencias por los supuestos delitos de conducción temeraria y conducción bajo los efectos del alcohol y las drogas, cuyas diligencias serán entregadas en el Juzgado de Guardia de la localidad de O Porriño.

El conductor, de ser considerado culpable por la Autoridad Judicial de un delito de conducción bajo los efectos del alcohol, podría enfrentarse a penas deprisión de 3 a 6 meses, o con la de multa de 6 a 12 meses, o con la de trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días y, en cualquier caso, con la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a 1 y hasta 4 años. Por otro lado, el delito de conducción temeraria, el otro por el que se investiga al implicado, se castiga en el artículo 380 del Código Penal con penas de prisión de 6 meses a 2 años, así como privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a 1 y hasta 6 años.

Desde el Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Pontevedra se quiere agradecer a la ciudadanía, la colaboración que realizan al advertir con sus llamadas de todas aquellas conducciones irregulares que observan, ya que puede con ello evitarse situaciones de riesgo para la seguridad vial.