El grupo criminal obtenía los datos personales de sus víctimas a través de una persona, que trabajaba en el control de accesos y fotografiaba los DNI o bien por medio de un instalador de alarmas
Agentes de la Policía Nacional han desarticulado un grupo criminal que estafó más de 300.000 € a particulares y 32.968 € a la Seguridad Social. Se han arrestado a 14 personas en Girona y se han practicado tres entradas y registros en domicilios de las localidades gerundenses de Playa de Aro y Calonge.
Los arrestados habían creado una empresa ficticia y, tras su alta en la Seguridad Social, solicitaban datos de falsos afiliados o clientes con la finalidad de determinar su solvencia y viabilidad de operaciones de crédito o préstamo personal. Con la información obtenida realizaban compras online mediante entidades financieras a nombre de sus víctimas. Obtenían estos datos personales a través de una persona, que trabajaba en un control de accesos y fotografiaba los DNI, o bien por medio de un instalador de alarmas.
Asimismo también habían creado, vinculada con las personas investigadas y para dar de alta a trabajadores ficticios con el objetivo de que éstos cotizaran, días de alta en el Régimen General de Trabajadores de la Seguridad Social para, posteriormente, solicitar distintas prestaciones y subsidios.
Tras recibir una denuncia por parte del Servicio de Prevención de Delitos Económicos de la Tesorería General de la Seguridad Social, procedente de la Dirección Provincial de Girona de la TGSS en relación a varios trabajadores que se encontraban afiliados en la cuenta de cotización de un empresario, los investigadores iniciaron las primeras pesquisas hasta averiguar que la mayoría de estas personas no tenían conocimiento de tal situación. Del mismo modo, los agentes también pudieron acreditar que diversas empresas de comercio online habían sido víctimas de un fraude masivo de financiación de consumo.
El modus operandi consistía en crear una empresa individual a través de una identidad presuntamente ficticia y darla de alta en Seguridad Social y Hacienda, donde de manera telemática, daban de alta a un gran número de falsos trabajadores. Esta empresa pantalla servía para ocultar y facilitar los intentos de fraude a las entidades financieras. El objetivo principal era burlar el proceso diario de solicitud e intercambio de datos, con consentimiento, entre las entidades pertenecientes a la Asociación Nacional de Establecimientos Financieros de Crédito y la Tesorería General de la Seguridad Social, comprobando la naturaleza de las actividades profesionales de sus clientes o afiliados (datos de alta, baja o jubilación), con la finalidad de determinar su solvencia y, por tanto, la viabilidad de operaciones de crédito o préstamo.
Con cada operación de alta de un trabajador, el supuesto empresario se garantizaba la respuesta positiva del sistema, para acto seguido cambiar el teléfono de contacto del empleado en las bases de la Seguridad Social. A su vez, solicitaba la vida laboral del trabajador asegurándose así el anonimato de sus actuaciones y el conocimiento pleno de la situación laboral de esa persona.
Posteriormente utilizaban la identidad del falso empleado para realizar una compra en una importante empresa de tecnología online financiada a través de entidades financieras, las cuales soportaban finalmente el pago total de estos productos. Los productos eran entregados mediante mensajería, usando la dirección y el teléfono aportados en la web por el comprador, siendo estos datos ajenos y desconocidos para el supuesto trabajador cuya identidad se habría utilizado.
El número de afiliados asciende a 103 personas y los investigadores han podido constatar que obtenían los datos personales a través de dos vías, bien por medio de un empleado de un bar que trabajaba en el control de accesos y les hacían una fotografía al DNI a los clientes, o bien a través de de un instalador de alarmas.
Asimismo y fruto de estas investigaciones, los agentes también hallaron otra empresa vinculada con las personas investigadas y que había sido igualmente utilizada para dar de alta a trabajadores ficticios, pero en esta ocasión con el conocimiento de los mismos. El objetivo de dicha maniobra es que los supuestos trabajadores cotizaran días de alta en el Régimen General de Trabajadores de la T.G.S.S para posteriormente, gracias a los periodos cotizados, solicitar distintas prestaciones y subsidios al SEPE, al INSS o a una mutua colaboradora. En el transcurso de las pesquisas, los investigadores han podido acreditar que 7 de los trabajadores ficticios habían cobrado estas prestaciones.
Finalmente la operación se ha saldado con la detención de 14 personas, algunas de ellas con diversos antecedentes policiales por diversos por estafa, falsedad documental, fraude de prestaciones y grupo organizado y se han practicado tres entradas y registros en domicilios de las localidades de Playa de Aro y Calonge (Girona). La cantidad total estafada a más de 100 personas es superior a los 300.000 € y el fraude de prestaciones a la Seguridad Social asciende a 32.968 €.