Investigadas: dos empresas de Pontevedra, siete personas por falsedad documental contra el mercado y los consumidores y pertenencia a grupo criminal
La Guardia Civil desarticuló un grupo organizado que se venía dedicando a la comercialización clandestina de erizos de mar y almejas procedentes del marisqueo furtivo en Portugal. Estas especies marinas llegaban a España y a través de dos empresas de la provincia de Pontevedra relacionadas con el sector alimentario se introducían con documentación falsa en el circuito legal hasta llegar al consumidor.
Las investigaciones realizadas por el Equipo del SEPRONA de la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra se iniciaron en el año 2018 al detectar un documento oficial falso que amparaba 300 kg. de equinodermos (erizo de mar) procedentes de Portugal.
Posteriormente, el 2 de mayo del mismo año, la patrulla del SEPRONA de Ponteareas interceptó una transacción de 650 kilos de erizos que se estaba realizando en el aparcamiento de un restaurante en el lugar de Tomiño, próximo a la frontera con Portugal. En esta ocasión, la mayor parte de la mercancía carecía de documentación de trazabilidad, localizándose documentos mercantiles donde figuraban como destinatarias las dos empresas pontevedresas.
Con la colaboración con los Servizos de Riscos Ambientais de la Xefatura Territorial de Sanidade de Pontevedra, se realizó un seguimiento de la trazabilidad de los erizos de mar y se realizaron inspecciones en un centro de expedición y depuración de moluscos, ubicado en la provincia de Pontevedra, receptor de estos productos, donde se detectaron más de un centenar de documentos de registro que fueron confirmados como falsos por la autoridad competente de Portugal, en coordinación con el Centro de Colaboración Policial y Aduanera (CCPA) de Tui.
Guardando una estrecha vinculación con estos documentos, también se intervinieron facturas asociadas de un operador comercial portugués, con domicilio social ficticio, que también resultaron falsas. Con todo ello se pudo deducir que durante el periodo comprendido entre los años 2017 y 2018, se habrían comercializado unas cuatro toneladas de productos procedentes del marisqueo, que reportaron unos beneficios económicos de 50.000 € aproximadamente.
En el transcurso de las investigaciones se relacionaron a dos operadores comerciales de Portugal como proveedores de los erizos de mar furtivos y bivalvos y a una empresa distribuidora e importadora que adquiría estos productos furtivos, en la provincia de Pontevedra, que los entregaba en las instalaciones de un centro pontevedrés de expedición y depuración de moluscos que aportaba su registro sanitario, desde donde les daban salida a sus clientes, tanto nacionales como de la Unión Europea.
Como consecuencia, el Equipo del SEPRONA de la Guardia Civil de Pontevedra procedió a la notificación, en calidad de investigados, a cinco personas de nacionalidad española y dos portuguesas, supuestamente relacionadas con esta actividad ilícita, a las que se les acusa de forma diferenciada de los delitos de: falsedad documental, contra el mercado y los consumidores y pertenencia a grupo criminal.
Las diligencias instruidas se entregaron en el Juzgado de Instrucción de guardia de Cambados por conducto de la Fiscalía de la Audiencia Provincial de Pontevedra.