Ingresó en el centro penitenciario de A Lama para cumplir varias condenas pendientes por distintos delitos de robo con violencia y robo con fuerza
Los hechos sucedieron cuando la patrulla de seguridad ciudadana de la Compañía de la Guardia Civil de Pontevedra detecta la salida de un vehículo de la zona de O Vao (Poio) en el que supuestamente viajaba un vecino del poblado que cuenta con numerosos antecedentes y reclamaciones judiciales en vigor.
El vehículo se interceptó momentos después, por la misma patrulla en el casco urbano de Pontevedra, donde se pudo comprobar que se trababa de la misma persona que tenía seis reclamaciones judiciales pendientes, por lo que se procedió a su inmediata detención.
Se trata de un varón, de 25 años, vecino de O Vao, que tenía tres órdenes judiciales de búsqueda, detención e ingreso en prisión: una del año 2017, dictada por el Juzgado de lo Penal nº. 1 de Pontevedra, por un delito de robo con fuerza y las otras dos del año 2019, del Juzgado de lo Penal nº 3 de Pontevedra, por sendos delitos de robo con violencia e intimidación.
A estas requisitorias se suman otras tres reclamaciones judiciales, en este caso bajo el concepto de búsqueda, detención y personación, todas ellas, dictadas el año 2019 por el Juzgado de lo Penal 3 de Pontevedra, por otros tantos delitos de robo con fuerza en las cosas.
Una vez instruidas las pertinentes diligencias, el detenido ingresó en el centro penitenciario de A Lama para cumplir las condenas que tenía pendientes por distintos delitos de robo con violencia y robo con fuerza.
Entre los cometidos habituales de la Guardia Civil figuran los de mantener y restablecer el orden público, prevenir y evitar la comisión de delitos y detener a delincuentes y personas requisitoriadas, es decir a los “procesados rebeldes” sobre los que haya dictada una orden judicial de búsqueda, localización y detención, ya sea para ser presentados ante la autoridad que los reclama, o para que ingresen en prisión.