Días antes esta persona se había quedado encerrado en su domicilio por un bloqueo de la puerta y llamó a un cerrajero para que abriese la misma

Este tipo de hechos son especialmente graves ya que el denunciante incurre en dos delitos, uno por denuncia falsa y otro por estafa al seguro

 

 

La Policía Nacional ha detenido a un varón vecino de Vigo que simuló haber sido víctima de un robo en su vivienda sita en la viguesa calle Rosalía de Castro, para cobrar la indemnización del seguro.

El pasado día 13 de marzo un varón se presentaba en Comisaría para denunciar que había sido víctima de un robo en su vivienda.

Inmediatamente se dio aviso a la Brigada de Policía Científica para que realizase una inspección ocular técnico-policial y recogiese las pruebas necesarias para su estudio. Cuando los investigadores comprobaron los hechos, descubrieron que había varios puntos que no se correspondían con un robo.

Ante la posibilidad de que se tratase de una denuncia falsa se volvió a revisar toda la documentación y se descubrió que días antes el denunciante y su familia se habían quedado encerrados en la vivienda ya que la puerta se había bloqueado y no podían salir.

Tras solicitar la presencia de un cerrajero, este logró desbloquear la puerta y realizar la apertura, para posteriormente reparar los sistemas de cierre.

Además la factura había sido modificada para enviarla a la compañía de seguros y la misma se acompañaba de una denuncia de robo que nunca había sucedido.

Por todo ello procedieron a la detención de este varón y a su traslado a dependencias policiales, así como a informar a los responsables de la aseguradora sobre los trámites a seguir.

Ya en Comisaría se realizó una comprobación de las bases de datos policiales, en la cual se confirmó que el detenido carecía de antecedentes policiales anteriores.

La detención fue llevada a cabo por agentes del Grupo de UDEV-Robos, pertenecientes a la Comisaría de Policía Nacional en Vigo-Redondela, pasando el detenido y todo lo actuado a disposición del Juzgado de Instrucción nº 2 de los de Vigo, en funciones de guardia.