ZULO: Agujero o habitáculo oculto, generalmente subterráneo y de dimensiones reducidas, que se usa para esconder a alguien o algo.

HABITACIÓN: Parte separada por paredes o tabiques en que se divide una casa u otro edificio, especialmente la que está destinada a dormir.

 

 

El pasado viernes, el 112 movilizaba a Guardia Civil y Policía Local de O Porriño para acudir a una llamada de auxilio por un supuesto de Violencia de Género en una vivienda de la parroquia de Cans, donde al parecer se informaba de que un varón retenía a una mujer en contra de su voluntad.

Al encontrarse la patrulla principal de la benemérita ocupada con otro detenido, acuden agentes de la Policía Local que, según fuentes fidedignas, llaman a la puerta del domicilio y quien les abre -el ahora detenido- les indica que sólo está él y todo está bien. Los agentes se dan la vuelta, pero vuelven ante la insistencia de un vecino, momento en el que entran y se encuentran a una mujer dentro de una habitación cerrada.

Una vez identificados ambos, se comprobó que el joven tenía una orden de alejamiento sobre ella, probablemente el motivo por el que la mujer  no quería ser encontrada y por el que se encaró a los agentes al ver que se lo llevaban; pues en el Juzgado no constan declaraciones de la víctima, por lo que se desconoce en qué momento ella habría afirmado estar retenida en contra de su voluntad o en qué momento ella hace entrega de las pequeñas cantidades de hachís incautadas, supuestamente de su pareja como se ha hecho público.

De este modo, lo que inicialmente sería una llamada por un posible delito de Violencia de Género, culminó con la detención del varón por el quebrantamiento de una orden de alejamiento y ella por agresión a un agente.