El comité pacta un ERE extintivo que sólo afectará a 34 trabajadores e insta a Xunta a garantizar la viabilidad de la empresa

 

La lucha incansable del cuadro personal de Maderas Iglesias -empresa de O Porriño dedicada a la fabricación de tarima flotante que se encuentra en una situación económica crítica- logró finalmente el mantenimiento de 200 puestos de trabajo, ya que la dirección accedió hoy a aplicar un ERE extintivo que sólo afectará a 34 personas, cuando su pretensión inicial era despedir a 150. Ahora la representación de los empleados insta a Xunta a cumplir su compromiso de mediar en busca de inversiones, que garanticen la viabilidad de la compañía.

La determinación y la unidad mostrada por los 234 trabajadores de Maderas Iglesias en la defensa de sus empleos, hizo que la dirección aceptara reducir su pretensión de aplicarle un ERE extintivo a 150 de ellos, cifra que tras las primeras negociaciones bajó hasta las 80 y que finalmente quedó en 34.

Además, tal y como explican desde el comité -CIG, CCOO y UGT-, todas las bajas son voluntarias.

El acuerdo se produjo hoy en el marco de las tensas negociaciones que se celebraron bajo la mediación de la Inspección de Trabajo. En total tuvieron lugar cinco juntas desde que se presentó el ERE hace un mes, las dos últimas bajo la supervisión de la autoridad laboral.

Desde el comité esperan que la Xunta “sepa aprovechar” el acuerdo firmado entre los trabajadores y la empresa, ya que entienden que se trata de un primer paso para que la compañía “pueda tener futuro” y siga siendo “un referente en el sector. A partir de ahora la Administración tiene que cumplir su compromiso de mediar en la búsqueda de inversiones que garanticen la viabilidad de Maderas Iglesias y el mantenimiento de los 200 empleos, la mayoría ocupados por mujeres”.