Numerosos vecinos acudieron a la cita que EU-Son de O Porriño oganizó con expertos en este elemento cancerígeno que se encuentra enterrado en Torneiros

El pasado jueves, EU-Son O Porriño organizó una charla en la que se presentó el “Informe sobre los efectos del Lindano”, elaborado por Ecologistas en Acción en una sala del Edificio Multiusos de Torneiros, que se quedó escasa para la gran concurrencia entre la que se encontraban numerosos vecinos afectados y preocupados -incluso de otros municipios-  por los efectos de la contaminación silenciosa e invisible de lindano, con la que llevan más de medio siglo conviviendo en la zona.

La charla estuvo moderada por Pedro Ocampo, portavoz de EU-Son de O Porriño, que destacó que “nuestro grupo ha presentado una denuncia a la Fiscalía de Pontevedra para que, de una vez por todas, tome medidas con lo que está sucediendo con el lindano, diseminado por todo el área”. El miembro de Ecoloxistas en Acción de Barakaldo y Responsable de las Acciones sobre lo Lindano en el Estado, Javier Vázquez, fue el encargado de presentar el Informe, elaborado por Ecoloxistas en Acción, sobre los efectos “de una sustancia de alta toxicidad que tiene un carácter persistente y acumulativo en las personas”.

También tomó la palabra el concejal de EzkerAnitza-IU de Barakaldo Eder Álvarez, que contó las experiencias con esta substancia tóxica en diferentes lugares de Bizkaia y Huesca “que mantienen actualmente focos de contaminación por esta substancia, es decir, a día de hoy siguen ocasionando un impacto de consecuencias incalculables”.

La coordinadora nacional de Esquerda Unida y vicepresidenta del Parlamento de Galicia, Eva Solla, habló de las consecuencias en la salud para las personas que conviven con este tóxico en el día a día y reveló que, desde En Marea, se llevará una batería de iniciativas al Parlamento, para preguntar a la Xunta de Galicia sobre las medidas que llevarán a cabo ante lo que está pasando con el lindano y como se coordinarán las administraciones para buscar soluciones”. 

Justamente, por la naturaleza del tóxico, es necesario que se evalúe la exposición de la población, que se demanden las responsabilidades que correspondan -penales, administrativas y políticas- a los causantes de la contaminación y se destinen, desde los gobiernos central y autonómicos, los presupuestos necesarios para llevar a cabo efectivas acciones efectivas.

Los asistentes y vecinos de O Porriño, también tomaron la palabra y expusieron diferentes problemas en relación a su situación: desconocen que tipo de pruebas tienen que hacer para saber si este tóxico actúa en su organismo, por su carácter acumulativo, no basta con la realización de analíticas de sangre; no saben como actuar para que les retiren este tóxico de delante de sus propias casas y caminos; y se sienten abandonados y maltratados por las diferentes administraciones, que no son capaces de desarrollar una estrategia conjunta para darles una solución. 

Desde Esquerda Unida, exigimos la implicación de las diferentes administraciones para paliar este problema ecológico y sanitario, que requiere de una respuesta inmediata que vaya más allá de cerrar los pozos de agua contaminados, de los que los vecinos llevan años abasteciéndose.