Saturnino Marcos Cerezo Cancelas alias “Canceliñas” se paseaba tranquilamente por las calles redondelanas cuando fue reconocido por un agente fuera de servicio
Tras la intensa búsqueda y controles policiales que se venían desarrollando en el sur de Pontevedra y fronteras con Portugal, al fin “Cancelas” ha caído.
El Jueves, 28 de noviembre, día en el que se cumplía un mes exacto desde que fuese asaltada en su domicilio una pareja de Torneiros, se producía al mediodía la detención de este prófugo que llevaba en busca y captura desde que, tras un permiso carcelario, no se personó de vuelta a la cárcel de La Lama, donde cumplía actualmente una de sus numerosas condenas.
Tras ser identificado por las víctimas del pasado asalto, junto al ya detenido Álvaro Miguel dos Santos Barbosa, Cancelas continuaba su huída paseándose por distintas localidades de nuestra provincia mientras las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, le seguían la pista gracias a la colaboración ciudadana que, tras reconocerlo en varias ocasiones, lo ponían en conocimiento de los distintos cuerpos que se mantuvieron en alerta en todo momento.
Ayer mismo, en torno a las 22.00 h, la Guardia Civil de Ponteareas recibía un aviso en el que se informaba haberlo visto por el municipio de Ganade, en un Peugeot 205 rojo con un golpe en la parte delantera izquierda y probablemente robado.
Sobre las 14:00 h. del jueves, la Policía Nacional de Redondela recibía la llamada de un compañero fuera de servicio, en la que aseguraba acabar de cruzarse con Saturnino Marcos, alias “Canceliñas”, caminando por el centro de Redondela; además de haber abandonado en esta localidad el vehículo del médico portugués al que habían secuestrado, Cancelas tiene familiares viviendo en este municipio, por lo que mantenían los ojos bien abiertos. Tras el reconocimiento, se pidieron refuerzos para su detención, ya que cabía la posibilidad de que fuese armado y se produjese una situación de riesgo para los viandantes y vecinos de la zona. Nada más lejos de la realidad, la detención fue inmediata, estaba desarmado y no opuso resistencia alguna. Se encontraba físicamente muy desmejorado, tanto que costaba reconocerlo teniendo como única referencia la fotografía que se había difundido a los medios para facilitar su localización.
Fue inmediatamente llevado a la comisaría de Policía Nacional de Redondela, de donde salió poco después hacia Vigo. Cancelas permaneció en las dependencias de la comisaría de la Policía Nacional de la viguesa calle López Mora, donde tras una primera declaración, permaneció a la espera de ser trasladado a la comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra, donde pasará la noche y permanecerá hasta pasar a disposición judicial.
Ampliaremos esta noticia en cuanto tengamos más datos.